"Mis canciones son también pequeñas crónicas históricas"
Cantante, compositor, escritor, poeta, visionario, ¿y de que otra manera se podría definir a Miguel Cantilo?
Simplemente como un buscador de verdades, con una profundidad necesidad de expresión.
Siendo todo un hippie, en la década del setenta comenzaste a componer, a reunirte en Plaza Francia y tenías un grupo con tu hermano llamado ¨Los Bad Boys¨. Aparte de ubicarnos cronológicamente, ¿qué onda hacían?
Hacíamos covers de Los Beatles, Los Rollins y de acá temas de los Shakers.
Cómo surgió la propuesta de armar algo (tal vez más en serio que Los Bad Boys) y grabar un disco con Pedro y Pablo una nueva historia en tu vida.
Surgió de la aceptación que chequeábamos entre el público casual que se reunía en fiestas, fogones, plazas y plazas, cuando cantábamos mis canciones con Jorge (Durietz).
Antes de ser "Pedro y Pablo" se llamaban: ¨ Cronopios", ¿no?
Sí, pero éramos un trío vocal y hacíamos covers en ingles.
¿Cómo consideras el período de censura que tuviste que soportar? Porque ya en 1971 sentiste la represión en carne propia con "Pueblo nuestro que estás en la tierra"
Como un período cuyos obstáculos solo consiguieron acentuar mi pasión por lo transgresor. Un gran estímulo para mi búsqueda de libertad de expresión.
La censura no se detuvo y a mitad de la década del 70 tuviste que partir para Centro América y tal cual como lo expresas en tu flamante libro ( Chau Loco!) contás que estabas atrapado entre el amor de China y la persecución del gobierno y la policía?
Efectivamente, así fue.
Pero llegó Europa, e Ibiza fue el centro de encuentro entre otros con Miguel Abuelo, Cachorro López, Kubero Díaz y el Mono Izarrualde entre otros. ¿Por qué todos se radicaban en Ibiza, que los incentivaba de la isla, que encantos tenía?
Ibiza era una zona liberada, una hospitalaria isla a la que acudían artesanos, artistas, viajeros y buscadores de todos los puntos del planeta. Para entonces ya tenía una tradición de una década de recibir marginales y opositores del stablishmen.
Y justamente en Ibiza armaste con Miguel Abuelo y Kubero Díaz un trío, el cual según Kubero era excelente y en algunas actuaciones se interrumpían el tránsito debido a la cantidad de público que presenciaba el show. ¿Cómo era esa aventura musical?
Libertaria como toda Ibiza. Sin reglamentos ni condicionamientos. Miguel Abuelo fue para mí, mi mejor maestro de calle.
Por ahí me comentaste que hacían "Mariposas de madera", "Que sea al sol" y que más... Componían o hacían las canciones ya realizadas?
No, hacíamos canciones que ya teníamos compuesta de antes.
¿Nunca pensaron en armar el trío profesionalmente y grabar, presentarse en vivo, componer?
Sí, por supuesto. Pero las condiciones de exiliados errantes en que nos encontrábamos, sin permisos de trabajo, sin domicilio fijo, hacían muy difícil concretar un negocio discográfico.
Pero luego tengo entendido que volvieron al ruedo en 1987 , aunque no dejaron asentado nada a nivel grabaciones.
Por esas mismas causas la aventura musical nunca pasó de sus actuaciones en vivo...
¿Cómo estaba Miguel (Abuelo) en su última etapa? Tanto en el ámbito artístico como humano?
Estaba muy orgulloso de sus logros con
Los Abuelos. Consideraba que su banda era "hiper number one" y los proclamaba a los cuatro vientos. Sin embargo, lo que él más amaba era su trabajo solista (
Buen día, día), su álbum en el que aparecía disfrazado de gaucho gay. En el aspecto humano estaba un poco descontrolado (y él mismo lo comentaba) con su práctica de "sex and drugs rock and roll.
Tuviste la posibilidad de escuchar su última producción "Canciones para cantar en el borde de la vereda", según se comentó un trabajo casi acústico e íntimo, hasta el día de hoy inédito.
No lo escuché y además no sé que sucedió con sus últimos trabajos musicales y literarios de Miguel Abuelo. Es como si alguien se hubiera adueñado de ellos con alguna rara finalidad y no los dejara salir a la luz.
Además de músico era un poeta maldito. Inclusive creo que a Miguel lo podríamos definir como un ¨Paladín¨, tal cual él llamo a su obra literaria. ¿la pudiste leer?
Nó, pero espero que algún día llegue a publicarse.
Dejando de lado un poco la historia y yendo al hoy del poeta Miguel Cantilo. ¿Cómo catalogas a "Chau Loco!", tu flamante libro que está inmerso en la cultura en la vida de los hippies en Argentina de la década del 60 y 70, en la cual vos estás incluido?
Al libro lo catalogo como una colección de pequeñas historias. Me apasiona la historia. Mis canciones son también pequeñas crónicas históricas. Es un libro autobiográfico.
Vale recordar que no es tu único libro, sino que además contas con tu producción publicada en 1991 llamada "Señales de vida¨. ¿Todavía puede conseguirse?
Sí, lo editó la misma editorial que a "Chau Loco!", Galerna.
"Es mejor cincuenta personas pensantes..."
Volviendo a lo estrictamente musical en que quedó el trío?
En Stand by. Estamos buscando producción y financiamiento para grabar y difundir como se merece el material sureño. Esto puede aparecer mañana o nunca.
Si tuvieses que definir al gran Kubero Díaz, ¿cómo lo haría?.
Como una esteta. Un tipo que a través de los sonidos, los colores y las palabras se expresa en un ámbito estético de gran contenido. Es un verdadero artista intuitivo.
¿Qué opinas de la actualidad de la Argentina? En donde grupos tropicales con canciones tontas, burlonas, llenan estadios, venden una impresionante cantidad de discos para lo que son. Y genios musicales como Kubero Díaz, el Mono Izarrualde y escalando aún más la escarpada, Miguel Cantilo, quien tiene toda una carrera bajo el brazo, repleta de poesías, historias, en pocas palabras un visionario total con mucho para dar todavía; tiene que presentarse ante cincuenta personas y tiene grandes dificultades para difundir sus materiales...
Opino que en cuanto a público se trata, es mejor cincuenta personas pensantes, formadores de opiniones y retransmisores de mensajes en la audiencia. Que quince mil sudorosos haciendo pogo a tus pies, totalmente descerebrados por el alcohol y la merca. Es una cuestión de actitud.
¿Y por qué crees que cuesta tanto encontrar nuevos valores, cuando hace treinta años atrás aparecían en cualquier esquina y uno mejor que el otro?
Existen, pero están tapados. Sucede que están tapados por la pátina de basura que fabrican los medios. Pero en un subterráneo recóndito se encuentran los poetas, los visionarios, los grandes instrumentistas y compositores. Pero, no te lo pasan por TV.
¿Quién está en el podio del rock argentino de todos los tiempos, incluyendo a Miguel Cantilo?
Eso que lo diga otro, es más, yo ni creo en los podios.
¿Qué proyectos tenés para el futuro?
Vivir el presente lo más interesantemente posible.
Por último, ¿ qué mensaje tiene Miguel Cantilo para los jóvenes en un país que está cada vez más duro. En donde hay ricos y pobres, pero muchos más pobres? Se puede confiar todavía y tener esperanzas? ¿Hay una salida?
Mientras haya aire se puede respirar... Los argentinos tenemos que abandonar la ilusión de encerrona, de callejón sin salida, de país terminal. Tenemos un país de la reputísima madre.
La geografía patagónica es única en el planeta. El que llore por los males políticos del país que tenga los huevos para recorrer el interior, para ver la realidad de la gente y no las pelotudeces que hablan los sindicalistas, los dirigentes y calientacabezas de uno y otro lado. Si este es un país lleno de pobres, entonces que recorran un poco América latina y se den cuenta dónde carajo viven.
¿O se creían europeos? Vivimos en el continente sudamericano. Una de las zonas más subdesarrolladas del planeta. Hay que luchar por crecer, por aumentar los niveles de solidaridad, de salud, de conocimiento. Pero eso no lo van a hacer los políticos, ni los militares ni las religiones , porque están todos en la transa. Eso lo tiene que hacer cada uno por el que necesitado que tiene al lado, porel núcleo vecinal al que pertenece, por su porción de comunidad.
Esta revolución es de cada uno, esta resistencia es del bocho y del corazón. "Este presente, tan duro, es el material con que edificaremos un mañana total". Si somos capaces, claro.
